Rechazo a la LGE empapa a la ministra de Educación El rechazo al proyecto de Ley General de Educación (LGE) se trasladó de escenario. En esta oportunidad afectó a una de sus principales caras: la titular del Mineduc, Mónica Jiménez, quien resultó mojada a causa del rápido y sorpresivo actuar de una alumna del Liceo Darío Salas. Mientras La Moneda condenó el acto, el Magisterio indicó que si bien no avalaba esta acción, sí la comprendía, considerando la ''represión'' de la que han sido objeto los estudiantes en las calles.
Esta mañana, la ministra de Educación Mónica Jiménez se disponía a cumplir con una actividad que consideraba un “diálogo” con estudiantes y docentes en el Hotel Crowne Plaza. La idea era que la titular del Mineduc conversará con los distintos actores sobre los alcances de la cuestionada Ley General de Educación (LGE).
Fue precisamente en ese ambiente donde la secretaria de Estado , ya instalada frente al podium del evento, comenzó a ser interrumpida por un grupo de estudiantes secundarios y dirigentes del Colegio de Profesores, quienes con pancartas y gritos lograron su cometido: hacer que la autoridad abandonara la testera.
Pero eso no fue todo. En momentos en que el clima comenzaba a ponerse tenso producto del avanzar de los manifestantes, una estudiante del Liceo Darío Salas se acercó a la ministra y le vacío un jarro con agua, dejando absolutamente “empapada” a la autoridad.
Producto de la agresión, Mónica Jiménez abandonó el salón. "Esto ha desprestigiado el movimiento de ellos. Han demostrado que no son capaces de dialogar. Me gustaría conversar de a uno (con ellos) porque en grupo se aleonan", sostuvo luego, más tranquila en una conferencia de prensa que se llevó a cabo en el subterráneo del recinto.
"Me gustaría conversar con esos muchachos, los noté muy violentos y con cualquier otro tema podrían reaccionar igual, no es una forma de enfrentar la vida", agregó.
Y con un poco de ironía agregó: "me ducharon, pero podría haber sido con agua más tibia. Si ellos querían que lo sintiera, lo sentí. Gracias por el jarro de agua, que es menos fuerte que el guanaco".
Por su parte, el presidente metropolitano del Colegio de Profesores, Jorge Abedrapo, negó que la agresión estuviese dentro de los planes del Magisterio.
“Nosotros entendemos a la estudiante, esa fue una actitud emotiva de ella propiamente de ella y tendrá responder ella. Pero nosotros entendemos perfectamente, porque la violencia que ha habido en contra de los estudiantes ha sido pavorosa. Les tiran agua pestilente, las apalean, tienen represión, las bombas, los gases (…) entonces, la entendemos, pero no estaba planificado”.