Detenciones ilegales, órdenes de arresto de dirigentes sociales y clausura de varios medios de comunicación, destacó la FIDH. Zelaya se defendió ante la ONU.
"Graves violaciones a los derechos humanos" en Honduras denunció este martes la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) en un comunicado en que condenó el golpe de Estado que derrocó al Presidente Manuel Zelaya, el que a llegó a exponer ante las Naciones Unidas.
"La FIDH condena el golpe de Estado en contra del presidente de Honduras, Manuel Zelaya, quien fue secuestrado por el Ejército y deportado por la fuerza a Costa Rica el día 28 de junio", señala el texto presentado en París.
La entidad señala "preocupación por los hechos subsiguientes que se han registrado que constituyen violaciones de los derechos humanos de los ciudadanos de Honduras y que podrían desembocar en hechos más graves de violencia".
En el detalle, la FIDH señala que se "han producido detenciones ilegales, se han girado órdenes de captura en contra de dirigentes sindicales y otros líderes sociales".
Agrega "violaciones al derecho de libertad de circulación del pueblo hondureño, la militarización de la capital, la interrupción del servicio público de transporte y la clausura de varios medios de comunicación".
La organización expresa su profunda preocupación por la seguridad de los defensores de los DDHH que ya han sido víctimas de una oleada de asesinatos y amenazas en los últimos meses y por la integridad física del gabinete y la familia de Zelaya.
El destituido mandatario expuso desde pasadas las 13:00 horas (hora de Chile ) ante el Consejo de las Naciones Unidas en Nueva York en donde defendió su gestión y denunció las acciones de los golpistas en contra de los miembros de su gabinete y de opositores.