Para enfrentar de buena forma las extensas esperas en los servicios de salud de urgencia que han generado los primeros hechos de violencia, el presidente de la Confederación de Funcionarios de la Salud Municipalizada (Confusam), Esteban Maturana, sugirió al Ejecutivo decretar un estado de emergencia sanitaria.
La iniciativa permitiría "poder contar con el apoyo del personal médico de las Fuerzas Armadas", según explicó el dirigente. "Estamos viviendo una situación de demanda creciente que responde al temor a ser una víctima más de la influenza humana", agregó.
El dirigente reconoció que se han prolongado notablemente los tiempos de espera, "en algunos casos de hasta 10 horas y claramente esto motiva a que la gente reaccione verbalmente y de manera agresiva frente a su impotencia".
Frente a ello, consideró importante plantearle al gobierno que ante una situación tan compleja se debe aumentar el nivel de apoyo de personal. A su juicio, es necesario "convocar a personal de las Fuerzas Armadas", previa declaración de "estado de emergencia", para hacer frente a una situación compleja "que recién empieza".
Al respecto, explicó que el invierno recién comienza y por lo tanto, "nos quedan aún muchas semanas de influenza, de virus respiratorio sincicial y de bajas temperaturas, es decir las consultas seguirán en aumento".