RECONSTRUIR CHILE CON EL COBRE CHILENO

Por: Jorge Lavandero

Aunque el gobierno fuese muy eficiente no podría resolver el grave problema que Chile esta afrontando con el terremoto y el maremoto. Nosotros tenemos una riqueza fundamental inmensa que por años ha alimentado al mundo desde Chile, nuestro cobre, nuestros recursos naturales mineros que le sirve a los países desarrollados y por años, y por ellos, no se ha pagado lo suficiente y en la mayoría de los casos nada.

Este país, donde el daño producido es de 500 mil viviendas en el suelo hasta ahora y de 1,5 millones de viviendas seriamente afectadas, esto significa una situación grave para más de 8,5 millones de chilenos.

Esta situación es imposible por si mismo de resolver pronto, ni menos antes del invierno, para entonces la situación será muy, pero muy dramática. Un buen gobernante debería tomar dos medidas esenciales:

La primera, un impuesto a la salida de nuestro cobre del país y financiar el enorme costo de la reconstrucción.- EE.UU. en la segunda guerra nos exigió bajar nuestro precio en los mercados internacionales en 1/3 de su valor, fue la contribución solidaria a la guerra por parte de Chile. Ahora colocarles un pequeño impuesto o un royalty verdadero, como el que en sus países pagan, sería una verdadera devuelta de mano en solidaridad internacional.

La segunda medida sería, con esos mismos dólares comprar casas prefabricadas, licitándolas internacionalmente en, Canadá, España, (España en un año ha construido 900 mil viviendas sólidas y algo nos deben…), en EEUU. o donde quieran que ellas se encuentren siempre que tengan una calidad reconocida y que sus propios técnicos y trabajadores vinieran con esas casas a instalarlas en cada localidad afectada. Eso demostraría con hechos reales que la solidaridad no solo son discursos, sino cosas concretas, ya que el Estado de Chile, por sí mismo, tanto en el sector público como en el privado no tienen capacidad de resolver la construcción en más de 120 mil viviendas anuales cada uno y será muy tarde para muchos chilenos cobijarse en la nada durante uno o dos inviernos, si no hacemos algo drástico y rápido los resultados de aquí a poco serán horrendos. En todo caso lo más importante es obtener los recursos necesarios para afrontar con rapidez la reconstrucción y para eso hay que tener voluntad política, tanto de la Pta Bachelet, como del Pte. electo S. Piñera.