LA SECH EN LA CUERDA FLOJA

Por Alejandro Lavquén

Finalizada la elección del directorio 2010-2012 de la Sociedad de Escritores de Chile (SECh), realizada el 15 de mayo del presente, y donde fue reelegido el señor Reynaldo Lacámara como máxima autoridad, la encargada de prensa de la institución, señora Ximena Troncoso, difundió ampliamente la noticia dándole estatus de “fiesta de la democracia” al proceso electoral. Esto, a pesar de las fundadas denuncias de irregularidades en el proceso de votaciones, sobre todo en la filial Coquimbo-La Serena, dadas a conocer por el candidato señor José María Memet, y las protestas de algunas filiales. De hecho, no participaron en la votación las filiales de Valparaíso, Concepción, Iquique, Punta Arenas y San Felipe, como protesta a la situación anómala.

Por otro lado, organismos fiscalizadores: Contraloría de la República y Ministerio de Justicia, emitieron sendos fallos en relación a las irregularidades, administrativas y financieras, detectadas en el informe de la Comisión Revisora de Cuentas de SECh para el año 2007 y en la rendición contable de proyectos presentada ante el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Las infracciones al estatuto y las instrucciones –imperativas- a cumplir por el directorio de SECh, y que incluye sancionar a los infractores, so pena, de no hacerlo, de perder la personalidad jurídica, se encuentran en el documento emitido por el Ministerio de Justicia “ORD.: 3447 del 18 de mayo de 2010”. En cuanto a las rendiciones irregulares de dineros públicos y a la orden de Contraloría, al Consejo Nacional de la Cultura y las Artes y a la Presidencia de la República, para que requieran a SECh la devolución de los dineros en cuestión, dentro del más breve plazo, se encuentran en el oficio de Contraloría “N° 001647 del 22 de abril de 2010”. De negarse SECh, a devolver los dineros, será acusada ante los tribunales de justicia por el órgano competente, es decir, el Consejo de Defensa del Estado. Los documentos citados son públicos y cualquier escritor los puede solicitar a través de la Ley de Transparencia o pedir una copia al Secretario General de SECh, el recién reelecto señor Eduardo Robledo, pues está en la obligación de entregarla.

Por lo tanto, lo que ahora cabe, dadas las pruebas a la vista, ratificadas por los organismos competentes, es que el señor Reynaldo Lacámara dé una explicación pública a los socios de SECh de todo Chile y renuncie a su cargo de manera inmediata. De lo contrario, debería ser sancionado por el directorio en base al Artículo Décimo Quinto, letra b.4 de los estatutos vigentes. También deben ser sancionados todos los que resulten culpables del descrédito y perjuicio económico provocado a la institución en relación con las ordenanzas fiscalizadoras.

En una entrevista al señor Lacámara, publicada en el Blog de SECh, pocos días antes de la elección, éste afirmaba que SECh no tenía cuentas pendientes con nadie y cualquiera que dijese lo contrario estaba mintiendo. Pues bien, las resoluciones del Ministerio de Justicia y Contraloría han dejado muy claro quién, o quiénes, eran los que mentían.

Enterado de esta situación, el tesorero recién electo, señor Marcelo Lira, ha manifestado que quienes deben devolver los dineros, rendidos irregularmente, son quienes hicieron las rendiciones, comenzando por el presidente que es el representante legal y el que, con su firma, autorizó las rendiciones. El señor Lacámara firmó los cheques que autorizaron los egresos de los dineros cuestionados. De la misma opinión es el ex – Vicepresidente, señor Gregorio Angelcos, y actual encargado de comunicaciones. También consideran que se debe investigar las rendiciones de la señora Ximena Troncoso, con respecto a las ferias de libros, debido a que la rendición presentada a tesorería, actualmente, es simplemente “impresentable”. Por último, el presidente deberá explicar cómo y porqué, sin consultar al directorio, declaró ante el Servicio de Impuestos Internos (SII), situaciones que no correspondían. Todo esto dentro de una serie de otras irregularidades que poco a poco van saliendo a la luz.

La situación de SECh no da para más, se ha llegado al límite de lo que hasta hoy podía soportar. Es imprescindible sanear la institución y devolverle su prestigio. Es necesaria una Asamblea Constituyente que autorice una directiva provisoria que llame a elecciones en breve plazo, dando garantías democráticas reales a todos quienes se presenten como candidatos. De lo contrario, SECh continuará en la cuerda floja, pero esta vez por poco tiempo, pues de no reaccionar, claramente la esperan los abismos. Aquellos desde donde no se regresa.