Nosotros, los pueblos del Abya Yala, hijos e hijas del cóndor, del quetzal y del águila, nos encontramos en Guapondelig del 20 al 24 de junio del 2011, en un gran abrazo de organizaciones, comunidades, nacionalidades, colectivos y personas del continente, junto a académicos, investigadores, científicos, escritores, poetas, artistas, soñadores, amadores de la vida, para defender el agua y la Pachamama. Durante estos días hemos intercambiado experiencias, reflexionado, debatido y construido propuestas que van a guiar nuestro andar en esta gran Minka por la Vida.
Compartimos con nuestros hermanos y hermanas del continente y del mundo, nuestros acuerdos:
CONSIDERANDO:
La dimensión de la devastación ecológica y de nuestro hábitat humano, a consecuencia del modelo civilizatorio cuyo eje es el mercado y la acumulación de riqueza.
Que es hora de tomar urgentes medidas para frenar y revertir esta barbarie expresada en el modelo extractivista y particularmente en la minería de gran escala, así como en la ampliación de la frontera petrolera que arrebata los derechos de los pueblos, comunidades y nacionalidades sobre sus territorios y formas ancestrales de vida, violando Derechos Humanos y de la Naturaleza, incluso bajo la forma de servicios ambientales solapados en la figura de programas de conservación.
Que el extractivismo profundiza el modelo patriarcal capitalista, explota y contamina los territorios y los pueblos, causa enfermedad y muerte, somete a las mujeres y desvaloriza su trabajo cotidiano del cuidado de la vida, ignora su participación a la hora de realizar consultas para los proyectos o políticas, genera violencia, femicidios y violaciones.
Que el Sumak Kawsay es la vida en armonía entre los seres humanos y la Pachamama de la cual es parte, que el Sumak Kawsay nace de los pueblos andinos como una propuesta universal.
Que la agroecología es parte de la soberanía alimentaria y de la cosmovisión del Sumak Kawsay
Que el agua es fuente de vida y el acceso a ella constituye un derecho humano, ratificamos la defensa de las fuentes de agua y los ecosistemas, y de sus ciclos vitales, indispensables para la reproducción de la vida.
Que la criminalización a personas y organizaciones defensoras de los derechos de las comunidades y de la naturaleza, se ha constituido en una política de Estado, que vulnera los derechos humanos y aquellos establecidos en la Constitución y en instrumentos internacionales.
Que Obispos de nuestro continente, asumiéndose como Profetas de la Vida instaron con firmeza que en las intervenciones sobre la naturaleza "no predominen los intereses de grupos económicos que arrasan irracionalmente las fuentes de vida, en perjuicio de naciones enteras..."
Que la Constitución del Estado Plurinacional del Ecuador garantiza la participación de las nacionalidades y pueblos con sus propias estructuras organizativas e institucionales para ejercer el derecho humano a la Comunicación desde un estado plurinacional.
DECLARAMOS:
A nuestra Abya Yala libre de minería metálica a gran escala, del saqueo y depredación.
A la intervención territorial y la destrucción que generan las corporaciones mineras como crímenes de Lesa Naturaleza.
Nuestra oposición a la expansión de las fronteras petroleras, a la construcción de refinerías y complejos petroquímicos.
RATIFICAMOS:
La resistencia y movilización permanente de los pueblos y nacionalidades del Abya Yala como legítima y sagrada y como el único camino de construcción del Sumak Kawsay. Consecuentemente declaramos el 11 de Octubre como el Día de la Libertad y Resistencia Continental.
Nuestro apoyo a los pueblos afectados por la explotación petrolera, reconocemos en su lucha la esperanza de abandonar la "civilización" petrolera, por la civilización del Sumak kawsay
La gestión comunitaria y pública del agua como garantía para preservar los derechos de la naturaleza y de las comunidades.
La importancia y el valor de los conocimientos y saberes ancestrales, como parte del acervo científico y cultural de la humanidad.
Que la Iniciativa Yasuní es una propuesta concreta a nivel global contra la crisis climática, para salvar a los pueblos libres que han recreado los bosques y salvaguardar una de las zonas de mayor biodiversidad del planeta. Condenamos la intención de explotar el Yasuní conocida como Plan B.
EXIGIMOS:
La Declaración Universal de los Derechos de la Naturaleza.
El cese de la explotación minera y de la ampliación de la explotación petrolera y minera, sobre todo la de gran escala, en nuestro continente. Que se restauren los sitios afectados por petróleo, minería y se devuelva su vocación natural.
El Derecho de los Pueblos indígenas y comunidades a continuar con sus formas de vida y a decidir sobre el destino de sus tierras y territorios.
La Consulta Previa, Libre e Informada como un derecho irrenunciable, expresión de los derechos colectivos de los pueblos y nacionalidades, cuya decisión debe ser tomada en cuenta y respetada.
Poner fin a su complicidad y patrocinio de los gobiernos con los intereses de las empresas extractivitas nacionales y transnacionales, permitiendo la violación de derechos humanos y de la naturaleza.
Poner fin a la criminalización de los y las defensoras de la naturaleza.
La desprivatización y desconcentración del agua para su redistribución social.
Que los gobiernos de las Américas develen las negociaciones sobre Cambio Climático, Biodiversidad y Agua, que encubren la privatización de las funciones de la Naturaleza y apropiación de los territorios
Que los gobiernos prioricen el Buen Vivir de los pueblos, su Soberanía Alimentaria y los Derechos de la Naturaleza.
Que las universidades contribuyan a promover el Sumak Kawsay, a través de los encuentros de saberes y prácticas ancestrales, a la producción del conocimiento y la recreación de la ciencia con ética, soberanía y autonomía, libre de los conflictos de intereses de las transnacionales, comprometida con la defensa de la Vida y la Naturaleza.
NOS COMPROMETEMOS A:
•Defender la vida y organizar la resistencia mediante todos los tipos de lucha (movilizaciones, denuncias públicas, etc.).
•Constituir una plataforma legal para levantar acciones y denuncias ante organismos nacionales e internacionales contra las compañías mineras, causantes de la depredación y violación de derechos.
•Impulsar acciones para derogar instrumentos jurídicos que facilitan la explotación petrolera y minera, así como la construcción de hidroeléctricas y otras obras de infraestructura destinadas al saqueo y devastación. Apoyaremos las acciones legítimas de los pueblos para impedir su operación.
•Rechazar públicamente y de manera contundente el concepto de Servicios Ambientales, que constituye una expresión de la mercantilización de la vida.
•Entregar nuestro apoyo al pueblo Kichwa de Sarayacu en su proceso ante la Corte Internacional de Derechos Humanos. Respaldamos su plan de vida Kawsay Sacha.
•Sostener la solidaridad y respeto con los Pueblos Amazónicos cuya tenacidad y testimonio vivo de las atrocidades cometidas por la Texaco/Chevron ha logrado sentencia favorable. Estaremos vigilantes para que la sentencia se efectivice.
•Respaldar a las comunidades Montubias de Río Grande en la Provincia de Manabí, para que se salvaguarde su integridad; la fuerza pública debe abandonar el territorio de estas comunidades.
•Promover la aplicación de la Declaración de la ONU sobre Derechos de los Pueblos Indígenas, y la real aplicación del Convenio 169-OIT, así como de los instrumentos que amparan los derechos colectivos (Territorio, Consulta, Políticas Interculturales, etc.)
•Conformar comisiones (con colectivos de afectados y organizaciones de apoyo), para la vigilancia del derecho al debido proceso de las personas criminalizadas por el Estado y/o empresas por defender sus derechos y los de las comunidades.
•Solicitar desde las organizaciones sociales la visita in situ al Ecuador de la Relatoría sobre defensores de derechos humanos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, a fin de que constate la situación en que se encuentran las y los defensores de Derechos Humanos y de la Naturaleza.
•Crear un sistema informativo para que las comunidades afectadas por los megaproyectos cuenten con información sobre sus impactos, sus derechos y mecanismos de exigibilidad.
•Impulsar el Sumak kawsay en las comunidades urbanas: formas de organización social, vivienda, comunicación, alimentación, transporte y energía limpia.
•Impulsar espacios de formación popular, construir alianzas con maestras/os para que integren en el proceso educativo, información, exposiciones, charlas, conferencias, talleres itinerantes, etc. que generen conciencia y promuevan el Sumak Kawsay.
•Dar seguimiento a las propuestas de este encuentro mediante la realización de eventos locales y provinciales, foros, redes sociales, publicaciones.
SUSCRIBIMOS ESTOS ACUERDOS LAS COMUNIDADES, ORGANIZACIONES, COLECTIVOS, INSTITUCIONES, MUJERES Y HOMBRES DE: ECUADOR, BRASIL, URUGUAY, ARGENTINA, CHILE, BOLIVIA, PERÚ, COLOMBIA, NICARAGUA, GUATEMALA, MÉXICO, CANADÁ, ESTADOS UNIDOS, ESPAÑA, ITALIA, INGLATERRA