REVÉS EN TEXTIL LO HABRÍA DEJADO EN ESTADO GRAVE

La noticia del quiebre en las negociaciones le provocó, supuestamente, un infarto vascular. Quedó con parálisis.

El dolor es visible en la cara de María Luisa González.
Su esposo está grave internado en el Hospital Las Higueras
y ayer recibió la visita de ánimo y apoyo del sacerdote
tomecino Ángel Jiménez.
Textos:TANIA MERINO: Crónica Si bien no trabajaba de forma directa para Bellavista, Carlos Ruiz llevaba casi 23 años transportando el personal de la decaída fábrica textil. De ella dependía su sueldo y el de otros tres chóferes bajo su mando. Por eso, su familia cree que no soportó cuando, la noche del viernes, se enteró que todo lo avanzado en las negociaciones había vuelto a punto cero. El hombre de 58 años, sufrió una serie de infartos vasculares, como consecuencia de los que permanece internado grave, con parálisis y sin habla, en el Hospital Las Higueras. Su mujer, María Luisa González, explicó que "vio las noticias y ahí se bloqueó. Estaba histérico por sus chóferes y por nosotros que llevamos casi cuatro meses sin sueldo", comentó. "Le preocupaba la cercanía de Navidad -es padre de dos niños, de 10 y 15 años- y que uno de sus conductores tiene a su esposa con un cáncer", detalló la dueña de casa, quien llamó a la empresa a buscar una solución al conflicto. "Pasó de ser un problema económico a ser uno de vida o muerte".
Más casos
Sealthiel Matamala, dirigente del Sindicato 1, agregó que durante el conflicto también han tenido bajas en las filas textiles. Hace unas semanas un empleado de telares quedó con su lado derecho del cuerpo paralizado, una mujer presentó parálisis facial y otra un ataque de histeria. Atribuyen estos males al estrés.
A SANTIAGO
Ayer los ocho dirigentes de los sindicato y 2 de Bellavista, junto al edil Tomecino, Eduardo Aguilera, partieron a Santiago a negociar otra vez.